CORONA DE AMOR A LA SANTÍSIMA TRINIDAD

Para liberar a las almas del cautiverio del pecado.

Esta Corona se compone de 7 Alegrías (Misterios). Los cinco Misterios Dolorosos y los dos primeros de los Gloriosos.

El collar de cuentas para este Rosario tiene siete misterios de diez cuentas rojas cada uno y tres al final del mismo color. Para separar cada misterio lleva una cuenta blanca. El avemaría que cierra el collar tiene la imagen de la Santísima Trinidad y al final cuelga la cruz con un Cristo.

Por la señal de la Santa Cruz, de nuestro enemigos líbranos Señor. En el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo. Amén.

Alegría (Misterio) correspondiente y petición.

Decir tres veces:

Guía: Alabado sea Jesús Sacramentado.

Todos: Sea por siempre bendito, alabado y adorado.

Decir diez veces:

Guía: Amo a Dios Padre, amo a Dios Hijo, amo a Dios Espíritu Santo.

Todos: Por toda la eternidad.

Guía: Gloria al Padre, al Hijo y al Espíritu Santo

Todos: como era en un principio ahora y siempre por los siglos de los siglos. Amén.

Todos: Oh María sin pecado concebida, rogad por nosotros que recurrimos a vos

ALEGRÍAS DE AMOR

1ª Alegría: La oración de Jesús en el Huerto. Gracias Señor por tu agonía en Getsemaní, te suplicamos nos des fortaleza para estar despiertos y en estado de oración para vencer las tentaciones y no pecar.

2ª Alegría: Los azotes que Jesús padeció atado a la columna. Gracias Señor por soportar los 5, 480 latigazos por amor a nosotros te pedimos nos infundas el deseo de honrar con Santa Brígida los azotes que recibiste para poder pagar nuestros propios pecados. (* Puedes hacer diario las 15  oraciones de Santa Brígida que son 15 Padres Nuestro, 15 Ave Marías con las 15 oraciones que Jesús le dictó)

3ª Alegría: La coronación de espinas. Gracias Señor por soportar la corona de espinas en Tu Sagrada Cabeza, sede de la Divina Sabiduría. Te pedimos perdón por lacerar tu Santa Cabeza a diario con nuestros malos pensamientos y te suplicamos seas dueño absoluto de nuestra cabeza para que solo te reconozcamos a Ti, como nuestro Señor y Amo y no volvamos a pensar en pecar. (*Puedes rezar la oración de reparación por la corona de espinas dada a Bernabé por Santa Cecilia, incluida en el Devocionario de la Preciosísima Sangre de Nuestro Señor Jesucristo)

4ª Alegría: El Señor con la Cruz a cuestas camino del Monte Calvario. Gracias Señor por cargar con nuestros pecados en esa pesada cruz, te imploramos nos des fortaleza para cargar nuestra cruz con amor y mansedumbre como Tú para alcanzar la purificación por tantos pecados cometidos.

5ª Alegría: La Crucifixión y Muerte del Señor. GRACIAS Señor Misericordioso por aceptar y por morir para salvarnos. Te pedimos que por tu misericordia nos perdones por haberte crucificado a diario con nuestros pecados que siguen lacerando tu cuerpo en agonía. Lava nuestros pecados con el agua de Tu Costado y danos a beber de tu Preciosa Sangre que brotó de Tu Corazón traspasado para unirnos fielmente a Ti.

6ª Alegría: La Triunfante Resurrección del Hijo de Dios. Gloria a Ti Señor Jesús, Fuente de Agua Viva que venciste a la muerte, te imploramos todos los días nacer y habitar por siempre en nuestro corazón.

7ª Alegría: La Ascensión de Nuestro Señor Jesucristo a los Cielos. Gloria a Ti Señor Jesús, alabado y glorificado seas por siempre, llévanos a tu reino para adorarte y alabarte por la eternidad.

ORACIÓN FINAL:

Oh! Dios, que escogiste a María como Hija Predilecta Tuya, Esposa del Espíritu Santo y Madre de Tu Hijo Divino. Y una vez llevada al cielo en cuerpo y alma glorioso, la proclamaste Reina  Universal. Haz que vivamos la grandeza cristiana de ser Templos Tuyos por la Gracias Santificante, y sintamos la experiencia gozosa de tener a María como Madre y Señora, que quiere y puede siempre ayudarnos. Por Jesucristo Nuestro Señor. Amén.

Para agradecerte los atributos que otorgaste a la Santísima Virgen María, Madre de Dios y Madre Nuestra te decimos:

"María Madre mía, líbrame de caer en pecado mortal.”
1. Por el poder que te concedió el Padre Eterno haciéndote la más poderosa en el cielo y en la tierra, así también asísteme en la tierra para fortificarme y apartarme de mi toda potestad enemiga. Dios te salve, María; llena eres de gracia; el Señor es contigo; bendita Tú eres entre todas las mujeres, y bendito es el fruto de tu vientre, Jesús. Santa María, Madre de Dios, ruega por nosotros, pecadores, ahora y en la hora de nuestra muerte. Amén.

«¡Oh María!, por tu Inmaculada Concepción, purifica mi cuerpo y santifica mi alma.».

2. Por la sabiduría que te concedió el Hijo asísteme en el trance de la muerte para llenar mi alma de las luces de la fe y de la verdadera sabiduría, para que no la oscurezcan las tinieblas del error y la ignorancia. Dios te salve, María; llena eres de gracia; el Señor es contigo; bendita Tú eres entre todas las mujeres, y bendito es el fruto de tu vientre, Jesús. Santa María, Madre de Dios, ruega por nosotros, pecadores, ahora y en la hora de nuestra muerte. Amén.

«¡Oh María!, por tu Inmaculada Concepción, purifica mi cuerpo y santifica mi alma.».

3. Por el Amor que te concedió el Espíritu Santo haciéndote tan amable que después de Dios eres la más dulce y misericordiosa, asísteme en la muerte llenando mi alma de tal suavidad de amor divino, que toda pena y amargura de muerte se cambie para mí en delicias”. Dios te salve, María; llena eres de gracia; el Señor es contigo; bendita Tú eres entre todas las mujeres, y bendito es el fruto de tu vientre, Jesús. Santa María, Madre de Dios, ruega por nosotros, pecadores, ahora y en la hora de nuestra muerte. Amén.

«¡Oh María!, por tu Inmaculada Concepción, purifica mi cuerpo y santifica mi alma.».

¡Gloria al Padre, al Hijo y al Espíritu Santo. Como era en el principio, ahora y siempre por los siglos de los siglos. Amén!"

* Hacer estas oraciones al terminar la corona o en otro momento.