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lunes, 28 de diciembre de 2015

La sagrada familia

28 de diciembre

Dios santificó a la familia humana al venir Jesús a nacer en la Sagrada Familia.

María

José

Jesús

cuidaban a Jesús, se esforzaban y trabajaban para que nada le faltara

-Se dedicaba a cuidar que no faltara nada en la casa.

-Educaba a su hijo según las Sagradas escrituras.

-Trabajaba duramente con gran esfuerzo para conseguir el sustento de la familia.

-Protegía a la familia.

-Aprendió a trabajar y a ayudar a su familia con generosidad.

-Obedecía fielmente a sus padres, confiaba en ellos, los ayudaba y los quería.

-Realizaba los más humildes trabajos diarios.

Virtudes de la familia

Amor, obediencia, sencillez, bondad, humildad, caridad, laboriosidad, responsabilidad, mansedumbre, sabiduría y gracia.

La familia debe ser una escuela de virtudes. En ella se forman los cimientos de la personalidad de los hijos para el resto de su vida y donde se aprende a ser un buen cristiano. Tiene la responsabilidad de educar en la fe a los niños.

Así como Jesús creció en sabiduría y gracia ante Dios y los hombres, nuestras familias debe educar a sus hijos a imitación de la educación que recibió el Niño Jesús para que ellos aprendan a ser amables y respetuosos, estudiosos, obedientes a sus padres y maestros, confiar en ellos, ayudarlos y quererlos, orar por ellos, y hacer oración en familia.
El porvenir, la salvación y la paz de la humanidad depende de la formación en la fe y el amor dentro de la familia desde el vientre materno. La embarazada que lee la Biblia y le habla a su bebé desde afuera se va formando según la ley de Dios.

Si las madres imitaran a María, los padres a San José y los hijos a Jesús la paz se viviría por doquier.

La familia es la máxima institución educadora la educación que den los padres a los hijos es lo que nuestros hijos mostraran al mundo y ahí se cumplirá especialmente el 4º mandamiento “Honrarás a tu padre y a tu madre”.

La educación de los hijos dentro de la familia cristiana debe favorecer en ellos aprender a amar a Dios sobre todas las cosas y amar al prójimo como a uno mismo, y más aún, como Cristo nos amó. Todos los males de hoy son producto de la educación que proviene de las familias y el remedio está en la misma familia: educar en el amor para el amor en base a las leyes de Dios.

La paz del mundo depende de responder:

A Jesús que cumpliremos sus mandamientos y educando a nuestros hijos según la ley de Dios.

A María haciendo lo que le pidió a los pastorcitos de Fátima: Rezad el rosario todos los días para alcanzar la paz del mundo y el fin de la guerra". Ella misma prometió que la familia que reza unida se mantendrá unida. Hoy es necesario que los niños inocentes formen la Armada Blanca (Niños que rezan el rosario por la paz del mundo) para detener esa guerra en Turquía, Siria, Irak, Rusia, Francia, Alemania, Estados Unidos. Una guerra que es absurda y que va en contra del amor a Dios.

La clave de la salvación está en la familia:

Obedeciendo las enseñanzas que Jesús nos dejó.

¿Cómo debe ser la familia cristiana?

Lo más posible semejante a la Sagrada Familia. Ejemplar unida en el amor de cristo: padres amorosos de sus hijos; hijos obedientes a sus padres, mujeres sujetas a sus maridos, esposos respetuosos de sus esposas viviendo en santidad.

Condiciones para Cultivar a la familia:

© La oración en familia: Dar gracias a Dios cada amanecer, ofrecer el día y rezar un Padre Nuestro, el Magníficat, Dulce Madre y ponerse la armadura de Dios (Efesios 6). Agradecer los alimentos a la hora de comer. Rezar el Rosario, al anochecer dar gracias por el día, pedir perdón por los pecados cometidos y pedir la ayuda del Señor. Se puede hacer el salmo 91.

© El estudio de la Palabra de Dios: Leer un texto bíblico en familia, reflexionarlo y llevarlo a la práctica.

© Vivir según las enseñanzas de Cristo. Coherente con el Evangelio Tener una vida de fe llena de obras (Sant 2,20). cumplir la Voluntad del Padre (Mt 7,21). Practicar las enseñanzas morales contenidas en la Biblia los diez Mandamientos, el Sermón de la montaña, el Catecismo (14 “obras de misericordia” :7 corporales y 7 espirituales) que ilustran ampliamente cuál es el modo de vivir según el Evangelio. Vivir en el amor y la caridad. Padres dando buen ejemplo a los hijos amándose profundamente, dándose el uno al otro como Cristo se dio por la Iglesia (Ef 5,21-33), perdonando hasta 70 veces 7 (Mt 18,22), Confiando en la Providencia más que en el dinero, desprendiéndose de lo material (Mt 6,24-34), ayudar al peregrino, al hambriento, al sediento, al desnudo, al enfermo, al encarcelado (Mt 25,33-40)

martes, 8 de diciembre de 2015

AÑO DE LA MISERICORDIA

Inició el año jubilar de la misericordia y la apertura de la Puerta Santa de la Basílica vaticana el martes 8 de diciembre a las 9,30 horas de Roma en la Plaza de San Pedro y finalizará el 20 de noviembre  de 2016, Fiesta de Cristo Rey del Universo.

– El Santo Padre ha concedido a todos los obispos del mundo poder dar la Bendición Papal en la Santa Misa de apertura de la Puerta Santa y en su clausura al final del Año.

– El domingo 13 de diciembre serán abiertas las Puertas Santas de todas las catedrales del mundo y la de la Catedral de Roma, la Basílica de San Juan de Letrán.

-A partir del inicio del Jubileo, en la Plaza de San Pedro será recitado el Rosario.

El Papa Francisco explicó las formas en las que los fieles podrán obtener la indulgencia durante este jubileo, previo cumplimiento de las condiciones habituales: confesión sacramental, comunión eucarística y oración por las intenciones del Santo Padre.

1.- Los fieles “están llamados a realizar una breve peregrinación hacia la Puerta Santa, abierta en cada catedral o en las iglesias establecidas, como signo del deseo profundo de auténtica conversión”.

2.- “Igualmente dispongo que se pueda ganar la indulgencia en los santuarios donde se abra la Puerta de la Misericordia y en las iglesias que tradicionalmente se identifican como Jubilares. Es importante que este momento esté unido, ante todo, al Sacramento de la Reconciliación y a la celebración de la Santa Eucaristía con un reflexión sobre la misericordia” y “será necesario acompañar estas celebraciones con la profesión de fe y con la oración por mí y por las intenciones que llevo en el corazón para el bien de la Iglesia y de todo el mundo”.

3.- Cada vez que un fiel realice personalmente una o más las obras de misericordia corporales y espirituales “obtendrá ciertamente la indulgencia jubilar”.

“De aquí el compromiso a vivir de la misericordia para obtener la gracia del perdón completo y total por el poder del amor del Padre que no excluye a nadie. Será, por lo tanto, una indulgencia jubilar plena, fruto del acontecimiento mismo que se celebra y se vive con fe, esperanza y caridad”, resalta el Papa.

4.- Los enfermos y las personas ancianas que no pueden salir de casa, el Pontífice afirma para ellos “será de gran ayuda vivir la enfermedad y el sufrimiento como experiencia de cercanía al Señor que en el misterio de su pasión, muerte y resurrección indica la vía maestra para dar sentido al dolor y a la soledad”.

“Vivir con fe y gozosa esperanza este momento de prueba, recibiendo la comunión o participando en la Santa Misa y en la oración comunitaria, también a través de los diversos medios de comunicación”.

5.- “En las capillas de las cárceles podrán ganar la indulgencia, y cada vez que atraviesen la puerta de su celda, dirigiendo su pensamiento y la oración al Padre, pueda este gesto ser para ellos el paso de la Puerta Santa, porque la misericordia de Dios, capaz de convertir los corazones, es también capaz de convertir las rejas en experiencia de libertad”.

6.- Indulgencia para los difuntos: “de igual modo que los recordamos en la celebración eucarística, también podemos, en el gran misterio de la comunión de los santos, rezar por ellos para que el rostro misericordioso del Padre los libere de todo residuo de culpa y pueda abrazarlos en la bienaventuranza que no tiene fin”.

Hay catorce obras de misericordia: siete corporales y siete espirituales.

I.- Obras de misericordia corporales:

En su mayoría salen de una lista hecha por el Señor en su descripción del Juicio Final. Son:

1) Visitar a los enfermos
2) Dar de comer al hambriento
3) Dar de beber al sediento
4) Dar posada al peregrino
5) Vestir al desnudo
6) Visitar a los presos
7) Enterrar a los difuntos

II.- Obras de misericordia espirituales:

Han sido tomadas por la Iglesia de otros textos que están a lo largo de la Biblia y de actitudes y enseñanzas del mismo Cristo: el perdón, la corrección fraterna, el consuelo, soportar el sufrimiento, etc. Son:

1) Enseñar al que no sabe.
2) Dar buen consejo al que lo necesita.
3) Corregir con dulzura al que se equivoca.
4) Perdonar al que nos ofende.
5) Consolar al triste.
6) Sufrir con paciencia los defectos del prójimo.
7) Rezar a Dios por los vivos y por los difuntos.

Vive intensamente este año jubilar de la Misericordia realizandolas obras de misericordia!

viernes, 13 de noviembre de 2015

LA SANTÍSIMA VIRGEN DE LA MEDALLA MILAGROSA.

27 de noviembre

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María es nuestra madre corredentora por expreso deseo de Jesucristo Redentor, que nos la legó en firme testamento firmado y sellado con su Preciosa Sangre desde la Cruz Redentora.
El día 27 de noviembre de 1830 nuestra bondadosa Madre del Cielo, le mostró a santa Catalina Labouré, con una visión, grabada con letras de oro, la jaculatoria ¡OH MARÍA SIN PECADO CONCEBIDA, ROGAD POR NOSOTROS QUE RECURRIMOS A VOS!, Esta jaculatoria, junto con llevar colgada al cuello la Medalla Milagrosa, por promesa de la Virgen, garantiza vivir bien, morir en paz con Dios y salvarte. Como Nuestra Madre amorosa nos escucha pidiéndole: “no desoigas nuestras súplicas en nuestras necesidades”, ella con maternal cuidado nos envía a través de la vidente Santa Catalina, la Santa de la Humildad y el Silencio, un rosario con el que ella satisface nuestras necesidades. Nosotros pedimos, Ella nos responde, entonces hagamos las oraciones que nos da con todo su amor para nuestro bien y salvación.

El áncora de salvación que la Santísima Virgen nos tiende a nosotros y ahora para nuestra santificación y posterior felicidad en el cielo, es:

1º. El rezo diario y devoto del Santo Rosario. (Todos los días del año)

2º. La consagración personal y sincera de todo nuestro ser al Inmaculado Corazón de la Santísima Virgen.

3º. Llevar puesta la medalla de la Santísima Virgen Milagrosa, como señal externa de la consagración.

Si lo cumplimos como la Santísima Virgen lo pide y desea, el éxito final del bien sobre el mal está asegurado. Lo ha prometido la Virgen, que nunca deja de cumplir sus promesas, con estas proféticas palabras:

"AL FINAL, MI CORAZÓN INMACULADO TRIUNFARÁ."

LA SANTÍSIMA VIRGEN PIDE LA CONSAGRACIÓN A SU INMACULADO CORAZÓN.

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SANTO ROSARIO DE JACULATORIAS DE LA MEDALLA MILAGROSA.

Por la señal de la Santa Cruz...

Felicitemos a la Santísima Virgen por el singular Privilegio de su Concepción Inmaculada
Bendita sea tu pureza y eternamente lo sea.
Pues todo un Dios se recrea en tan graciosa belleza.
A ti celestial Princesa, Virgen sagrada María
Te ofrezco, en este día, alma, vida y corazón.
Mírame con compasión, no me dejes, Madre mía.

Atendiendo el deseo de la Virgen Santísima Milagrosa recemos con confianza y fervor las siguientes Oraciones...
1ª INVOCACIÓN: Madre mía amantísima, Santísima Virgen de la Medalla Milagrosa, en todos los instantes de mi vida acordaos de mí, miserable pecador.
Padre nuestro
Decir 10 jaculatorias:

GUÍA: ¡OH MARÍA SIN PECADO CONCEBIDA

TODOS: RUEGA POR NOSOTROS QUE RECURRIMOS A VOS!
Gloria

2ª INVOCACIÓN: Acueducto de las divinas gracias, Santísima Virgen de la Medalla Milagrosa, concededme abundancia de lágrimas para llorar mis pecados.
3ª INVOCACION: Reina de cielos y tierra, Santísima Virgen de la Medalla Milagrosa, sed mi amparo y defensa en las tentaciones de mis enemigos.
4ª INVOCA CIÓN: Inmaculada, Santísima Virgen de la Medalla Milagrosa, alcanzadme de vuestro Santísimo Hijo las gracias que necesito para mi salvación.
5ª INVOCACIÓN: Abogada y refugio de nosotros pobres pecadores, Santísima Virgen de la Medalla Milagrosa, asistidme en el trance de la muerte y abridme las puertas del cielo.
PEDIDO DE GRACIA Y FINAL: Pídase la gracia que por intercesión de la Santísima Virgen se desee alcanzar...
Y denle gracias por las ya obtenidas.

Ruega por nosotros Santa Madre de Dios. Para que seamos dignos de alcanzar y gozar las promesas de nuestro Señor Jesucristo.

ORACIÓN
Señor nuestro Jesucristo, que quisisteis honrar con innumerables milagros a vuestra Madre la beatísima Virgen María, inmaculada desde el primer instante de su concepción, concédenos que, implorando siempre su patrocinio, consigamos los goces eternos. Por Jesucristo nuestro Señor. Así sea.

SÚPLICA DE SAN BERNARDO

Acudamos a la maternal protección y amparo de la Santísima Virgen con la siguiente súplica (de San Bernardo):

Acordaos, ¡oh piadosísima Virgen María!, que jamás se ha oído decir que ninguno de los que han acudido a vuestra protección, implorando vuestra asistencia y reclamando vuestro socorro, hayan sido abandonados de Vos. Animado con esta confianza, a Vos también acudo, ¡oh Virgen Madre de las vírgenes!, y, aunque gimiendo bajo el peso de mis pecados, me atrevo a comparecer ante vuestra presencia soberana. No desechéis, ¡oh purísima Madre de Dios!, mis humildes súplicas, antes bien escuchadlas y atendedlas favorablemente.

LA SALVE REZADA 0 CANTADA

Dios Te salve Reina y Madre de Misericordia…

Se reza a las 5 de la tarde del 27 de Noviembre, Fiesta de la Medalla Milagrosa, y en las necesidades urgentes, cualquier día, a esa hora.
Oh Virgen Inmaculada, sabemos que siempre y en todas partes estás dispuesta a escuchar las oraciones de tus hijos desterrados en este valle de lágrimas, pero sabemos también, que tienes días y horas en los que te complaces en esparcir más abundantemente los tesoros de tus gracias. Y bien, oh María, henos aquí postrados delante de Ti, justamente en este día y hora bendita, por Ti elegida para la manifestación de tu Medalla. Venimos a Ti, llenos de inmensa gratitud y de ilimitada confianza en esta hora por Ti tan querida, para agradecerte el gran don que nos has hecho dándonos tu imagen, a fin que sea para nosotros testimonio de afecto y prenda de protección. Te prometemos, que según tu deseo, la santa Medalla será el signo de tu presencia junto a nosotros, será nuestro libro en el cual aprenderemos a conocer, según tu consejo, cuánto nos has amado, y lo que debemos hacer para que no sean inútiles tantos sacrificios tuyos y de Tu Divino Hijo. Sí, Tu Corazón traspasado, representado en la Medalla, se apoyará siempre sobre el nuestro y lo hará palpitar al unísono con el tuyo. Lo encenderá de amor a Jesús y lo fortificará para llevar cada día la cruz detrás de Él.

Ésta es tu hora, oh María, la hora de tu bondad inagotable, de tu misericordia triunfante, la hora en la cual hiciste brotar, por medio de tu Medalla, aquel torrente de gracias y de prodigios que inundó la tierra. Haz, oh Madre, que esta hora que te recuerda la dulce conmoción de Tu Corazón, que te movió a venirnos a visitar y a traernos el remedio de tantos males, haz que esta hora sea también nuestra hora, la hora de nuestra sincera conversión, y la hora en que sean escuchados plenamente nuestros votos.

Tú, que has prometido justamente en esta hora afortunada, que grandes serían las gracias para quienes las pidiesen con confianza: vuelve benigna tu mirada a nuestras súplicas.

Nosotros te confesamos no merecer tus gracias, pero, a quién recurriremos oh María, sino a Ti, que eres nuestra Madre, en cuyas manos Dios ha puesto todas sus gracias? Ten entonces piedad de nosotros. Te lo pedimos por tu Inmaculada Concepción, y por el amor que te movió a darnos tu preciosa Medalla. Oh Consoladora de los afligidos, que ya te enterneciste por nuestras miserias, mira los males que nos oprimen.

Haz que tu Medalla derrame sobre nosotros y sobre todos nuestros seres queridos tus benéficos rayos: cure a nuestros enfermos, dé la paz a nuestras familias, nos libre de todo peligro. Lleve tu Medalla alivio al que sufre, consuelo al que llora, luz y fuerza a todos. Especialmente te pedimos por la conversión de los pecadores, particularmente de aquéllos que nos son más queridos. Recuerda que por ellos has sufrido, has rogado y has llorado. Sálvanos, oh Refugio de los pecadores, a fin de que después de haberte todos amado, invocado y servido en la tierra, podamos ir a agradecerte y alabarte eternamente en el Cielo. Amén

PRESENTACIÓN DE LA SANTÍSIMA VIRGEN MARÍA

21 de noviembre

imageSegún el "Protoevangelio de Santiago" la Virgen María era muy niña cuando sus padres San Joaquín y Santa Ana la llevaron al templo de Jerusalén presentándola con un vestido blanco y un manto azul, ambos con bordadura de oro; siendo la vestimenta que la de la advocación Mariana de la Inmaculada Concepción. Dejaron a María en el Templo para ser instruida respecto a la religión y a todos los deberes para con Dios.

Este día se celebra la consagración que María hizo de sí misma a Dios, por eso muchas personas renuevan las promesas de consagración religiosa, recordando la oblación primordial que hizo María de sí misma. Dios nos invita a ser como María: Templos Vivos de Dios: “¿No sabéis que sois templos de Dios y que el Espíritu de Dios habita en vosotros? Si alguno destruye el templo de Dios, Dios le destruirá a él; porque el templo de Dios es sagrado, y vosotros sois ese templo.” (1 Corintios 3, 16-17) Renovemos las promesas con el Padre y seamos Templo Vivo de Dios imitando las virtudes de María.

Oración:
Te rogamos, Señor, que a cuantos hoy honramos la gloriosa memoria de la santísima Virgen María, nos concedas, por su intercesión, participar, como ella, de la plenitud de tu gracia. Por nuestro Señor Jesucristo.
Amén.

domingo, 8 de noviembre de 2015

Cristo Rey

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Fiesta 22 de noviembre 2015, último domingo del año litúrgico

La fiesta de Cristo Rey fue instaurada por el Papa Pío XI el 11 de diciembre de 1925. El Papa quiso motivar a los católicos a reconocer en público que el mandatario de la Iglesia es Cristo Rey. Cuando Pilatos le preguntó a Jesús si era el Rey de los Judíos, le respondió claramente que su reino no es el de esta tierra (Jn 18, 36) donde predomina la mentira y el pecado, puesto que Jesús es un Rey de reconciliación, salvación, paz, amor y verdad. Sus súbditos son OBEDIENTES y SANTOS.

Al anunciar su reino, Jesús nos presenta en primer plano su infinita misericordia, en torrente de perdón y amor.

¿Quiénes son los que gozarán del reino de Dios?

El significado de la palabra reino como nos confirma la Palabra de Dios es gobierno; por lo cuál debemos entender que el reino de Dios es aquél donde existe el dominio del rey (Dan. 4,22-31), reconociendo en nuestro corazón que todo poder viene de Dios y que quien rechaza a los enviados de Dios, rechazamos directamente a Jesús porque no queremos que Él reine sobre nosotros, rechazando al mismo tiempo, la voluntad de Dios sobre nosotros. (1 Sam. 8,7). Al reconocer el reino de Dios, aceptamos que Él es quien gobierna y quien hará justicia a nuestras negligencias (Sal. 9-5 y 9); Su trono está en el cielo, allí está su reino y a Él le imploramos: “atiende a la voz de mi clamor, oh mi Rey y mi Dios. Porque a ti te suplico” (Salmo 5,3)

Jesús nos dice claramente quienes son los que gozarán de su reino:

Los pobres de espíritu; los perseguidos por causa de la justicia, porque de ellos es el Reino de los Cielos. (Mt. 5, 3 y 10) el que observe los mandamientos y los enseñe; el más justo que los escribas y los fariseos. (Mt. 5, 3 y 19); el “más pequeño” (Mt 11.11); el que dq a Dios lo que es de Dios (Lc. 17,20-21); el que escucha a los que Dios envía a predicar su Palabra, siendo semilla que crece en tierra fértil, el que guarda las cosas de Dios en el corazón, las practica y las transmite a otros (Marcos 4,26 y 32 Mt. 21,43); el que adora y solo sirve al Señor su Dios". (Mt. 4,8; 12,25-26); el que prepara el camino al Señor, allanando sus senderos. (Mt. 3,3). El que tiene verdadera fe como el buen ladrón que creyó en Jesús aceptando su pecado e implorando su misericordia: "Señor, acuérdate de mí cuando estés en tu reino”.

El reino de Dios por lo tanto significa, el reinado de Dios en nuestros corazones; obedecer sus mandamientos y enseñarlos a nuestros hijos y a los demás, tal como nos lo dejó claramente explicado Jesús en el Sermón de la Montaña (Mateo 5,6 y7)

¿Gozarás del reino de Dios?

Dice Jesucristo: Si quieres salvarte, cumple los mandamientos.

1º.- ¿Amas a Dios por sobre todas las cosas, lo adoras y solo le sirves a Él? ¿Amas al prójimo como a ti mismo?
2º.- ¿Tomas en serio el Nombre de Dios, en verdad y en justicia?.
3º.- ¿Santificas las fiestas participando de ellas, especialmente de las Santas Misas Dominicales y de otras fiestas según el calendario litúrgico de nuestra Iglesia?.
4º .- ¿Honras a tu padre y a tu madre con tu buen comportamiento como hijo y si eres menor de edad, con tus buenas calificaciones escolares y en obediencia? Si eres adulto y ya tienes familia ¿honras a tus padres dando educando en la fe a tus hijos, haciendo de ellos personas dignas hijas de Dios?
5º .-¿Defiendes la vida? El aborto es matar una vida inocente, indefensa.
6º .-¿Llevas una vida decorosa, santa? ¿Tus actos agradan a Dios?
7º .- ¿Respetas las cosas de los demás?¿Agarras algo que no es tuyo?.
8º .- ¿Dices mentiras? ¿Hablas mal del prójimo?.
9º .- ¿Has tenido malos pensamientos o deseos impuros?
10º.-¿Codicias lo que tienen otras personas?

Jesús es el Mesías y nuestro Redentor; nuestra luz y salvación, la Verdad y la Vida Eterna es el Juez Justo y Cristo Rey, un Rey infinitamente misericordioso que nos conduce a la ciudad Santa, la nueva Jerusalén dónde está el reino de Dios" (Apoc. 21,2): hábrele tu corazón y deja que reine en ti.

 

¿Quieres ser discípulo de Cristo Rey?

Si nos mantenemos en la Palabra de Dios, dice Jesús: “seréis verdaderamente mis discípulos, y conoceréis la verdad y la verdad os hará libres” pues “todo el que comete pecado es un esclavo. Y el esclavo no se queda en casa para siempre; mientras el hijo se queda para siempre. Si, pues, el Hijo os da la libertad, seréis realmente libres. (Jn 8, 31-42)

Cristo es un Rey que nos da libertad del pecado y la libertad de elegirlo o de rechazarlo, no te obliga a que creas en Él, sino que te muestra el verdadero camino para llegar al Padre y Él mismo es el camino la verdad y la vida, nadie va al Padre sino por Jesús que nos ama y nos conduce a su Padre. (Juan 14:6 )

San Lucas (11:28) nos recuerda: “bienaventurados los que oyen la palabra de Dios y la obedecen!

Obedecer a Dios cumpliendo sus Leyes, llevando una vida santa sin pecado, imitando la vida que Jesús, cumpliendo las enseñanzas morales más grandes que nos dejó (Mateo Cap. 5 al 7), amándonos los unos a los otros como verdaderos hermanos de Cristo. Abramos nuestro corazón de par en par para escuchar a Dios (Marcos 7, 31) y obedecer sus mandatos.

martes, 27 de octubre de 2015

Visita de la Inmacuada Virgen de Juquila

DSCN7768El 26 de octubre llegó la Virgen de Juquila a La Parroquia de Nuestra Sra de los Lagos de la Colonia Santa Fe. Y llegó para quedarse pues una familia regaló a la parroquia una rèplica de la nueva imagen de Nuestra Sr de Juquila. 

 

 

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A la izquierda la réplica de la Virgen de juquila que está recorriendo Oaxaca. Al centro en el Nicho la Virgen de San Juan de los Lagos patrona de la parroquia. Sobre el altar la imagen de la Virgen de Juquila que se queda en la Parroquia.

Dios nos ama tanto que nos deja a la Inmaculadapara que a ejemplo de ella podamos seguir el camino de humildad de María y mantenernos limpios de pecados para ser dignos de entrara a la casa de Dios y gozar de las promesas de Jesús.

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Hagamos nuestra oracion de consagracion a la virgen.

lunes, 12 de octubre de 2015

Rosario a las Almas del purgatorio

Visita de la Virgen al purgatorio

 

Es, pues un pensamiento santo y saludable el rogar por los difuntos, a fin que sean libres de sus pecados. (2 Mac. XII, 45-46). Orar por  almas del Purgatorio (Iglesia purgante) es un pedido que Jesús hizo a tres santas, a tres esposas de su amantísimo corazón: Santa Gertrudis la grande, a Santa Faustina Kowalska y a Sor Maria Consolata Betrone.

 

A  cada una de ellas le dió una oración:

imageSanta Gertrudis, La Grande:

"Eterno Padre, te ofrezco la Preciosísima Sangre de tu Divino Hijo, en unión con todas las Misas celebradas hoy en todo el mundo, por todas las Santas Almas del Purgatorio. Amén".

Nuestro Señor le dijo a Santa Gertrudis la Grande, que esta oración puede librar 1000 almas del purgatorio cada vez que se rece.

imageFaustina Kowalska:

“El Señor me pidió que rezara este rosario (la coronilla) durante los nueve días que preceden a la Fiesta de la Misericordia, comenzando el día de Viernes Santo. Entonces, me dijo: Por esta novena concederé todas las gracias posibles a las almas(11, 197). También se puede hacer esta novena en otros momentos y por cualquier necesidad. Es un Rosario a través del cual Jesús en su infinita misericordia nos otorga, a la iglesia militantes (los vivos) perdón de nuestros pecados y a la iglesia purgante (los difuntos) el perdón de sus pecados reduciendo sus penas en el purgatorio  y su pronta salida para ir a la Gloria del Padre.

Jesús le dijo esta santa: “Deseo que durante estos nueve días encamines almas hasta el manantial de Mi misericordia, para que encuentren allí la fortaleza, el refugio y toda aquella gracia que necesiten en las penalidades de la vida, y especialmente en la hora de la muerte. Cada día traerás a Mi corazón un grupo de almas diferentes y las sumergirás en el océano de Mi misericordia y Yo conduciré todas esas almas a la mansión de Mi Padre...   Todos los días implorarás a Mi Padre gracias para esas almas en atención a los méritos de mi amarga Pasión.”

El Señor de la Misericordia le pidió para el octavo día de la novena que le llevara a las almas del Purgatorio:

“Hoy tráeme a las almas que están detenidas en el Purgatorio y sumérgelas en el abismo de mi Miseriordia. Que torrentes de Mi Sangre refresquen el ardor del Purgatorio. Todas estas almas son muy amadas por Mí. Ellas cumplen con el justo castigo que se debe  a Mi justicia.  Está en tu poder llevarles alivio. Haz uso de todas las indulgencias  del Tesoro de Mi Iglesia y ofrécelas en su nombre.  Oh si conocieras los tormentos que ellas sufren  ofrecerías continuamente por ellas las limosnas del espíritu y saldarías las deudas que tienen con Mi justicia.

Oración:

Jesús Misericordioso, Tú mismo  has dicho que deseas la misericordia, heme aquí que llevo a la morada de Tu muy compasivo Corazón, a las almas del purgatorio, almas que Te son muy queridas pero que deben pagar su culpa adeudada a Tu justicia. Que los torrentes de Sangre y Agua  que brotaron de tu Corazón, apaguen el fuego del Purgatorio para que también allá sea glorificado el poder de Tu Misericordia.  Padre Eterno vuelve tu mirada Misericordiosa sobre las almas que sufren en el purgatorio y que están encerradas en el muy Compasivo Corazón de Jesús. Te suplico por la dolorosa Pasión de Jesús, Tu Hijo y por toda la amargura con la cual  Su Sacratísima alma fue  inundada, muestra Tu Misericordia  a las Almas  que estan bajo tu justo escrutinio. No las mires sino a través de las heridas de Jesús, Tu Amadísimo Hijo, porque creemos firmemente que Tu bondad y Tu compasión no tienen límites. Amén

La coronilla de la Divina Misericordia tiene Indulgencia Plenaria, establecida por Juan Pablo II para toda la Iglesia el segundo Domingo de Pascua, tal como pidió Jesús en el Diario de Santa Faustina.

imageMaría Consalata Beltrone

Jesús enseñó a Sor M. Consolata Bertrone un Acto de Amor sencillísimo que debía repetir frecuentemente, prometiéndole que cada Acto de Amor salvaría el alma de un pecador y que repararía mil blasfemias.

La fórmula de este Acto es:

"Jesús, María, Os Amo, Salvad las Almas"

A estas tres esposas Jesús les pidió especial devoción por las almas purgantes, les mostró los sufrimientos de las almas en el lugar de la purificación, les enseñó el misterio del purgatorio, y también les entregó oraciones para realizar por las almas.

Otras santas a quienes les dió oraciones por las almas del purgatorio:

María Valtorta

Jesús dicta a María Valtorta.

“Llega el mes dedicado a los difuntos. Ruega así por ellos:

¡Oh Jesús!, que con tu gloriosa Resurrección nos has mostrado cómo serán eternamente los ‘hijos de Dios’, concede la santa resurrección a nuestros seres queridos, fallecidos en tu Gracia, y a nosotros, en nuestra hora. Por el sacrificio de tu Sangre, por las lágrimas de María, por los méritos de todos los Santos, abre tu Reino a sus espíritus.

¡Oh Madre!, cuya aflicción finalizó con la alborada pascual ante el Resucitado y cuya espera de reunirte con tu Hijo cesó en el gozo de tu gloriosa Asunción, consuela nuestro dolor librando de las penas a quienes amamos hasta más allá de la muerte, y ruega por nosotros que esperamos la hora de volver a encontrar el abrazo de quienes perdimos.

Mártires y Santos que estáis jubilosos en el Cielo, dirigid una mirada suplicante a Dios, y una fraterna a los difuntos que expían, para rogar al Eterno por ellos y para decirles a ellos: ‘He aquí que la paz se abre para vosotros’.

Amados, tan queridos, no perdidos sino separados, que vuestras oraciones sean para nosotros el beso que añoramos, y cuando por nuestros sufragios estaréis libres en el beato Paraíso con los Santos, protegednos amándonos en la Perfección, unidos a nosotros por la invisible, activa, amorosa Comunión de los Santos, anticipo de la perfecta reunión de los ‘benditos’ que nos concederá, además de gozarnos con la visión de Dios, el encontraros como os tuvimos, pero sublimados por la gloria del Cielo”.

Con el fin de mostrar mi amor a Jesús, al Padre, al Espíritu Santo y a María, retomando las oraciones que Cristó dió para pedir por las almas del purgatorio he formado el siguiente rosario para las almas del purgatorio. Con la única intención de ayudar a lasalmas purgantes a gozar de la Promesa de Dios de ir a la Gloria del Padre.

Se usa un Rosario de 5 misterios con 10 cuentas en cada uno de ellos. Ya sea el Rosario de cuentas rojas del Sagrado Corazón de Jesús o el Rosario de la Misericordia.

El Rosario por las almas del Purgatorio con las oraciones dadas por Jesús a sus tres esposas espirituales.

Nos ponemos en presencia del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo para ofrecer esta coronilla por las almas del purgatorio.

En la Cruz: La Señal de la Cruz.

Credo

Padre Nuestro

Ave María

Oración dada a Sor Faustina:

Jesús Misericordioso, Tú mismo  has dicho que deseas la misericordia, aquí me tienes para llevar a la morada de Tu muy compasivo Corazón, a las almas del purgatorio, almas que Te son muy queridas pero que deben pagar su culpa adeudada a Tu justicia. Que los torrentes de Sangre y Agua  que brotaron de tu Corazón, apaguen el fuego del Purgatorio para que también allá sea glorificado el poder de Tu Misericordia.  Padre Eterno vuelve tu mirada Misericordiosa sobre las almas que sufren en el purgatorio y que están encerradas en el muy Compasivo Corazón de Jesús. Te suplico por la dolorosa Pasión de Jesús, Tu Hijo y por toda la amargura con la cual  Su Sacratísima alma fue  inundada, muestra Tu Misericordia  a las Almas  que estan bajo tu justo escrutinio. No las mires sino a través de las heridas de Jesús, Tu Amadísimo Hijo, porque creemos firmemente que Tu bondad y Tu compasión no tienen límites. Amén

Padrenuestro, Avemaría y Credo.

En las cuentas grandes: (en vez del Padre Nuestro):

"Eterno Padre, te ofrezco la Preciosísima Sangre de tu Divino Hijo, en unión con todas las Misas celebradas hoy en todo el mundo, por todas las Santas Almas del Purgatorio. Amén".

En las diez cuentas de cada decena:

Jesús, María os amo, salvad las almas.

Al Final de cada misterio:

Oh Sangre y Agua, que brotaron del Corazón de Jesús como una fuente de Misericordia para nosotros…

-en Ustedes confío.

Las almas de los fieles difuntos (puede hacerse petición especial por alguno aqui) por la misericordia de Dios

- descansen en paz, así sea.

Si con tu Sangre Preciosa los has redimido

-que los perdones te pedimos por tu pasión dolorosa.

Virgen Madre Dolorosa que consuelas  afligida

-que lo saques te pedimos de la cárcel tenebrosa

 

Oración por los difuntos (dictada a María Valtorta):

 

¡Oh Jesús!, que con tu gloriosa Resurrección nos has mostrado cómo serán eternamente los ‘hijos de Dios’, concede la santa resurrección a nuestros seres queridos, fallecidos en tu Gracia, y a nosotros, en nuestra hora. Por el sacrificio de tu Sangre, por las lágrimas de María, por los méritos de todos los Santos, abre tu Reino a sus espíritus.

¡Oh Madre!, cuya aflicción finalizó con la alborada pascual ante el Resucitado y cuya espera de reunirte con tu Hijo cesó en el gozo de tu gloriosa Asunción, consuela nuestro dolor librando de las penas a quienes amamos hasta más allá de la muerte, y ruega por nosotros que esperamos la hora de volver a encontrar el abrazo de quienes perdimos.

Mártires y Santos que estáis jubilosos en el Cielo, dirigid una mirada suplicante a Dios, y una fraterna a los difuntos que expían, para rogar al Eterno por ellos y para decirles a ellos: ‘He aquí que la paz se abre para vosotros’.

Amados, tan queridos, no perdidos sino separados, que vuestras oraciones sean para nosotros el beso que añoramos, y cuando por nuestros sufragios estaréis libres en el beato Paraíso con los Santos, protegednos amándonos en la Perfección, unidos a nosotros por la invisible, activa, amorosa Comunión de los Santos, anticipo de la perfecta reunión de los ‘benditos’ que nos concederá, además de gozarnos con la visión de Dios, el encontraros como os tuvimos, pero sublimados por la gloria del Cielo”.

Para solicitar con amor a nuestra Santísima Madre María su ayuda para que saque a las almas del purgatorio y las entregue a su Misericordioso Hijo Jesús  recitemos las letanías.

Señor ten piedad de las ánimas       

                                                      ... ten piedad de las ánimas

Cristo...

Señor...

Cristo, óyenos

Cristo, escúchanos

Dios, Padre Celestial                        

Dios Hijo, Redentor del mundo

Dios, Espíritu Santo

Trinidad Santa, único Dios

Santa María,                                      

                                               ... ruega por las ánimas

Santa Madre de Dios

Santa Virgen de las Vírgenes

Madre de Jesucristo

Madre de la Divina Gracia

Madre de la Iglesia

Madre purísima

Madre castísima

Madre y Virgen

Madre Santa

Madre inmaculada     

Madre amable

Madre admirable

Madre del buen consejo

Madre del Creador

Madre del Salvador

Virgen prudentísima

Virgen digna de veneración

Virgen digna de alabanza

Virgen poderosa

Virgen clemente                            

Virgen fiel

Espejo de justicia                             

Trono de la eterna sabiduría

Ideal de santidad

Causa de nuestra alegría

Templo del Espíritu Santo

Honor de los pueblos

Modelo de entrega a Dios

Rosa escogida

Fuerte como la torre de David

Hermosa como la torre de marfil

Casa de oro

Arca de la nueva Alianza

Puerta del cielo

Estrella de la mañana

Salud de los enfermos

Consoladora de los aflijidos

Refugio de los pecadores

Auxilio de los cristianos

Reina de los ángeles

Reina de los patriarcas

Reina de los profetas

Reina de los apóstoles

Reina de los mártires

Reina de los que viven su fe

Reina de las vírgenes

Reina de todos los santos

Reina concebida sin la mancha del pecado original

Reina del santísimo Rosario

Reina elevada al cielo

Reina de la paz

Cordero de Dios que quitas el pecado del mundo

Perdónanos, Señor

Cordero de Dios que quitas el pecado del mundo

Escúchanos, Señor

Cordero de Dios que quitas el pecado del mundo

Ten piedad de nosotros

y de las benditas ánimas del santo Purgatorio. Amén.

Ruega por nosotros, Santa Madre de Dios, para que seamos dignos de alcanzar las promesas de nuestro Señor Jesucristo. Amén.

Al final del Rosario, se reza en las tres últimas cuentas antes de la Cruz:
Santo Dios, Santo Fuerte, Santo Inmortal, ten piedad de  las almas del purgatorio, de nosotros  y del mundo entero.

 

Si se desea hacer este rosario por algun familiar en especial hacemos la siguiente oración al inicio.

ORACIÓN PARA PEDIR POR EL ALMA DE UN DIFUNTO EN PARTICULAR.

            Oh Adorable Corazón de Jesús, por los dolores que sufriste pendiendo en la cruz, por tus cinco llagas y tu costado herido, por lo latigazos recibidos y por tu preciosísima sangre derramada para nuestra salvación, te suplicamos que purifiques y redimas el alma de tu siervo (a) y hermano (a) nuestro (a).

            Devuélvele la vida y concédele el descanso eterno que solo obtenemos al estar a tu lado. Dale a él (ella) la eterna luz para que goce en el cielo de la gloria de tus santos. Otórgale, Señor, tu divina protección.

Consuela asimismo a sus familiares y amigos que hoy sienten su muerte y haz que llegue a éstos la resignación cristiana. Que acepten el estado de la muerte como un paso transitorio y obligado hacia la vida verdadera que se obtiene estando a tu lado.

Todo esto te lo pedimos por el purísimo Corazón de María, nuestra augusta Madre y por la intención de tu padre punitivo San José, quien compartió su vida con la Tuya y a quien luego despediste de este mundo terrenal. Amen

 

Podemos ofrecer a Dios le Rosario de la Divina Misericordia ofreciéndolo con la intención del 8o día de la novena dada a sor Faustina.

 

Ayudemos a Dios a salvar almas. Recemos en octubre y noviembre este rosario como cuarentena o novena. terminando el día 2 de Noviembre y ofreciendo este día una Santa Misa por los difuntos.

 

Por qué rezar por las almas del purgatorio? Una respuesta amplia podemos la conocemos en los escritos de las santas mencionadas y otras personas que tuvieran el encargo de Jesús de rezar por las almas del purgatorio.

https://www.youtube.com/watch?v=1xdS7h3dYL4 

sábado, 26 de septiembre de 2015

La Biblia

Fuente: vatican.va

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La Sagrada Biblia

EL LIBRO DEL PUEBLO DE DIOS

La Biblia, de la palabra griega βιβλίον (biblíon), que significa rollo, papiro o libro, y de la expresión griega τὰ βιβλία τὰ ἅγια (ta biblía ta hágia), que significa los libros sagrados. Es el conjunto de libros inspirados por Dios (2 Tim. 3:16), por el Espíritu Santo (2 Ped. 1:21). Toda es Palabra de Dios (Lc. 11:28, Heb. 4:12), de Cristo (Col. 3:16). Para conocer y escuchar a Dios lee la Biblia, el Testamento de Dios que dejó a sus hijos.

 

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Contiene dos grandes colecciones de libros de los dos Testamentos, el Antiguo y el Nuevo del Canon bíblico de 73 Libros

ANTIGUO TESTAMENTO está integrado por 46 libros o escritos que cuentan la historia de la salvación y la espera del Salvador.

NUEVO TESTAMENTO integrado por 27 libros o escritos que cuentan la llegada del Salvador hasta su ascensión.

Ignorar la Biblia es ignorar a Dios” _San Jerónimo

Para escuchar y obedecer la Palabra de Dios lee:

1. Shema, Israel (Deuteronomio 6,4-10)

2. Esdras lee al pueblo el Libro de la Ley (Nehemías 8, 1-12)

3. Obediencia, desobediencia de la Palabra (Jeremías 22)

4. Parábola del Sembrador (Macabeos 4, y 9)

5. El Sermón de la Montaña (Mateo 5, 6 y 7)

“Lámpara es a mis pies tu palabra y lumbrera en mi camino”. Salmo 119, 105

Jesús nos dice: “Yo soy la Verdad, el Camino y la Vida. Nadie va al Padre, sino por Mí” Jn. 14,16 “Si me aman guardarán mis mandamientos” Jn 14.15

¡Dichosos los que escuchan la Palabra y la practican!

“La hierba se seca, la flor se marchita pero la Palabra de nuestro Dios permanece firme para siempre” Isaías 40:8

Si leemos la Palabra de Dios y la recibimos como en tierra fértil, dará frutos en nosotros y permanecerá para siempre.